DISEÑO Y TALENTO
Jornada final del Proyecto europeo Texmedin
Barcelona, 9 de febrero de 1012
Organizada por el Centre de Documentació i Museu Tèxtil, uno de los nueve socios del proyecto, la Jornada se desarrolló en tres partes - introducción y dos mesas de debate- con ponentes procedentes del ámbito del diseño -tejidos, moda y complementos- , de la formación, de la industria y de la política, moderados por Imma Urrea (periodista) y Filippo Guarini (Director del Museu del Tessuto de Prato).
Se pretendía crear un espacio abierto, que permitiera intercambiar opiniones, darse a conocer y establecer contactos; la respuesta fue notable, con casi un centenar de inscritos: profesores y alumnos de escuelas de Diseño, profesionales vinculados a pequeñas empresas de moda y complementos, diseñadores free-lance, artesanos, técnicos de museos especializados y, por descontado, los socios italianos, griegos y españoles del proyecto Texmedin. Por tanto, el terreno era perfecto para compartir inquietudes, detectar aspectos problemáticos y plantear posibles líneas de trabajo. La experiencia reciente adquirida en el transcurso de los inspiring labs del Texmedin permitía partir de una serie de puntos fuertes y débiles sobre los cuales ponentes y moderadores articularon sus intervenciones.
La conclusión unánime de la Jornada es que debemos mirar la crisis como una oportunidad que nos obliga a hacer las cosas de otro modo.
Por tanto, conviene modificar muchas cosas. De entrada, la actitud. No estamos tan mal; y sin embargo sólo hacemos caso de las noticias negativas. Tenemos materia prima (profesionales, industria, tecnología, un gran patrimonio donde documentarnos, experiencia académica…) pero lo primero que necesitamos es creer en nuestra capacidad, y a continuación, saber trabajar en equipo. Hay que romper barreras y abrir espacios de comprensión entre escuelas e industria, entre fabricantes textiles y confeccionistas, entre industria e instituciones. Debemos tener la valentía de cambiar y no esperar a que lo hagan los demás. Hay que hacer el cambio mental de darle al tiempo su lugar, buscando un ritmo de creación más coherente con nuestros procesos mentales y emocionales. Hemos de fomentar el conocimiento para que nazca la innovación. Y hemos de ser conscientes de que tenemos un gran potencial; sólo basta que nos lo creamos.
